El planeta Tierra tiene nada más y nada menos que 4500 millones de años de historia de los que tenemos constancia gracias a lo que conocemos como registros geológicos. Estos son bienes de interés científico y natural que deben ser protegidos no solo por los beneficios de su explotación, sino por su valor intrínseco.
El patrimonio geológico de un territorio está configurado, entre otros registros, por Lugares de Interés Geológico (LIG), que son zonas de alto valor en alguna de las disciplinas geológicas, como formaciones, depósitos, rocas, fósiles… Entre ellos destacan los geosites.
¿Qué es un geosite?
Es un lugar de importancia internacional que destaca por su contexto geológico. Se trata de LIGs seleccionados de acuerdo a la metodología establecida en el programa internacional Global Geosites, promovido por la Asociación Europea para la Conservación del Patrimonio Geológico (ProGEO) y la Unión Internacional de las Ciencias Geológicas (IUGS) con el co-patrocinio de la UNESCO.
Dentro del marco de este proyecto los geosites no se seleccionan directamente, sino que se plantea un paso previo: en cada país se eligen unos contextos geológicos o frameworks fundamentales para entender la evolución de planeta, y luego se seleccionan los lugares de interés más representativos del mismo. Después cada país identifica los suyos y luego se comparan con los seleccionados en otros países para elegir los de valor supranacional y global.
En España es el Instituto Geológico y Minero, en colaboración con la Sociedad Geológica de España, el organismo encargado de desarrollar este proyecto. Aunque en 1999 se identificaron 18 contextos —posteriormente ampliados a 20— y 144 geosites representativos de los mismos, en la actualidad el número ha ascendido a 21 frameworks y 252 geosites.
Ya que los geosites se definen a partir de su contexto, nosotros hemos decidido seleccionar un geosite por framework y así recopilar una lista de 21 lugares de interés geológico, para que puedas ver ejemplos representativos de todos ellos.
Geosites
1. Arribes del Duero – Red fluvial, rañas y relieves apalachianos del Macizo Ibérico
Este espacio protegido, declarado Parque Natural, se caracteriza por las gargantas de paredes subverticales y centenares de metros de profundidad que el Duero y sus afluentes han labrado siguiendo las fallas y diaclasas existentes en la roca. En el paisaje granítico, de rica fauna y flora, la llanura contrasta con los profundos cañones. En el cañón del río Uces se localiza una de las cascadas más espectaculares de la península: El Pozo de los Humos.
Foto tomada de patrimonionatural.org.
2. Albufera de Valencia – Costas de la Península Ibérica
El Parque Natural de la Albufera es una laguna costera somera al sur de Valencia. Está separada del mar por una estrecha barra litoral arenosa (restinga) con dunas estabilizadas por bosques de pinos, llamada Dehesa del Saler. Sus dunas forman un ecosistema distintivo creado por el mal humor de la naturaleza en forma de temporales marinos y fuertes vientos.
Foto tomada de viuvalencia.com.
3. Ciudad Encantada de Cuenca – Sistemas kársticos en carbonatos y evaporitas de la Península Ibérica y Baleares
Situada en Valdecabras, en el corazón del Parque Natural de la Serranía de Cuenca y rodeada de amplios pinares, la Ciudad Encantada es uno de los paisajes más impresionantes del país. Tiene su origen hace 90 millones de años, cuando formaba parte del fondo del mar de Tetis. Sus aguas tranquilas propiciaron la deposición de sales, y tras la retirada del mar por la orogenia alpina hoy podemos contemplar sus formaciones rocosas calcáreas caprichosas, y aprender sobre el proceso geológico del karst.
Foto tomada de spain.info.
4. Yacimientos paleontológicos del Cámbrico de Murero – Sucesiones estratigráficas del Paleozoico inferior y medio del Macizo Ibérico
Sección estratigráfica completa y fosilífera que exhibe un registro continuo de los sedimentos marinos del Cámbrico Inferior y el Medio. En ella se refleja la historia ocurrida a lo largo de unos 10 millones de años a través del seguimiento de más de 100 especies de invertebrados, como los abundantes trilobites, los braquiópodos, equinodermos, crustáceos, algas… Es por todo esto que los yacimientos son conocidos entre los paleontólogos como la Capilla Sixtina del Cámbrico. Fueron descubiertos en 1862 y en 1997 fueron declarados Bien de Interés Cultural (BIC). Nosotros adecuamos en 2008 la ruta que los recorre, puedes verlo aquí.
Foto tomada de observersciencetourism.com.
5. Bosque Carbonífero de Verdeña – El Carbonífero de la Zona Cantábrica
Este “bosque petrificado” es un yacimiento paleontológico hallado durante una explotación de carbón a cielo abierto al oeste de Verdeña, Palencia. Allí quedó descubierto un nivel de arenisca con restos fósiles de un bosque del Carbonífero; puede verse un paleosuelo vertical con estructuras estrelladas (huellas de tocones y troncos de hace 300 millones de años). El bosque estaba próximo al mar, y debido a un movimiento sísmico una rápida inundación segó los troncos, algunos del género Sigillaria, hasta derribarlos y separarlos de sus raíces.
Foto tomada por Shalbat.
6. Yacimientos paleontológicos del Jurásico de Ricla – El rifting de Pangea y las sucesiones mesozoicas de las Cordilleras Bética e Ibérica
Registro fosilífero de increíble relevancia para el estudio del Jurásico. Debido a que sus restos abarcan todas sus etapas de manera prácticamente continua, en el campo de la paleontología Ricla es un referente mundial. De hecho, en Ricla se celebran las Jornadas Aragonesas de Paleontología, bianuales y organizadas desde 1989. Aquí se halló el famoso Maledictosuchus riclaensis, también conocido como el “cocodrilo de Ricla” un fósil único en el mundo y del que nosotros hicimos una réplica. También en esta zona se encuentra el yacimiento Barranco de las Conchas, en el que se han hallado otras piezas fósiles.
Maledictosuchus riclaensis en el Museo de Ciencias Naturales de la Universidad de Zaragoza.
7. Icnitas de dinosaurios de Galve – Fósiles e icnofósiles del Mesozoico continental de la Península Ibérica
Galve cuenta con un excepcional registro de fósiles de vertebrados, especialmente de dinosaurios. José María Herrero, uno de sus vecinos, halló casi 70 yacimientos, y el año pasado se reinauguró el museo paleontológico de la localidad para conservar y exhibir gran parte de los fósiles excavados bien por él, por sus hijos o por los diversos equipos de investigación que han trabajado allí a lo largo de los años. El registro fósil de la zona abarca icnitas, caparazones de tortugas, huesos de colosales saurópodos o interesantes tireóforos, fósiles de micromamíferos, escamas de peces, dientes de terópodos…
Icnitas en el yacimiento Las Cerradicas, Galve (Teruel).
8. Límite K/T de Zumaia – Secciones estratigráficas del límite Cretácico-Paleógeno
El límite Cretácico/Paleógeno (K/T) de Zumaia es un registro bioestratigráfico, uno de los primeros cortes que se estudiaron para documentar la teoría del impacto de meteorito causante de la extinción en masa del límite K/T, que se caracteriza por marcar una gran extinción de la fauna marina. Este límite, que puede identificarse a través de una capa arcillosa en la cala de Algorri, es un referente mundial para el estudio de la extinción finicretácica y también para la extinción repentina de los ammonites.
Foto tomada de info.igme.es.
9. Discordancias progresivas del Alto Cardener – Cuencas sinorogénicas surpirenaicas
Ejemplo único de sedimentos de crecimiento asociados a la formación de una estructura tectónica. Las discordancias progresivas son un referente geológico mundial en las que la magnificencia del escenario panorámico se suma a la calidad del afloramiento. Se aprecian tres discordancias progresivas sintectónicas: la del Codó, de edad fini-eocena, la del Tossal de Vall-Llonga y la de Gogul, ambas de edad oligocena. Pueden verse desde la sierra de Busa en San Lorenzo de Morunys, en el prepirineo catalán.
Foto tomada de geologicalmanblog.wordpress.com.
10. Yacimiento de mamíferos del Mioceno en Concud – Cuencas cenozoicas continentales y yacimientos de vertebrados asociados del Levante español
El yacimiento de Concud (Teruel) es relevante por su abundancia en restos fósiles de mamíferos muy bien conservados. Abarca el Barranco de las Calaveras, conocido desde el siglo XVIII —cuando se debatió acerca del supuesto gigantismo de la humanidad, ya que interpretaron que los huesos encontrados provenían de alguna gran batalla—, así como el Cerro de la Garita. Este fue descubierto en 1924 y es la localidad tipo de dos géneros y cuatro especies de mamíferos: Canis cipio (el representante más antiguo de la fauna europea), Hispanodorcas torrubiae, Turiacemos concudensis e Hipparion concudense.
Foto tomada de info.igme.es.
21 geosites que tienes que conocer | parte 2
*[Foto de portada tomada de salamancaemocion.es]
Noticias relacionadas
Inventariando geositios en el Geoparque Mundial de la UNESCO Villuercas-Ibores-Jara
14 museos paleontológicos del mundo seleccionados para ti
Turismo cultural y natural como recurso para combatir la despoblación
Día Internacional de la Geodiversidad: la geodiversidad es para todos y todas
