Se conoce como íberos al grupo de tribus que habitaban en el levante y sur de la Península Ibérica hasta hace unos 2000 años y que compartían una lengua común, siendo este rasgo el que, según los expertos, define al pueblo íbero. De entre los restos arqueológicos que han contribuido a conocerlos mejor, destacan los yacimientos íberos del Bajo Aragón, atribuidos a la tribu de los Ositanos o Ausetanos y que constituyen un importante patrimonio arqueológico y cultural.
Para dar a conocer este importante legado se creó la ruta “Íberos en el Bajo Aragón”, un referente del turismo cultural y arqueológico enfocado a recuperar y poner en valor los yacimientos íberos. Más relevantes de la zona. El proyecto está promovido por el Consorcio Patrimonio Ibérico de Aragón, creado en 2007, y que está constituido por 24 entidades locales, entre ellas, las Diputaciones Provinciales de Teruel y Zaragoza, el Gobierno de Aragón, Turismo de Aragón y diversas comarcas, municipios y Grupos de Acción Local del Bajo Aragón.
Los yacimientos arqueológicos que integran la ruta son los del Cascarujo, El Palao y El Taratrato (Alcañiz), La Guardia (Alcorisa), Parque arqueológico y necrópolis de El Cabo (Andorra), Cabezo de Alcalá (Azaila) y La Tallada y La Loma de los Brunos (Caspe).
Conservación arqueológica
Siendo por lo tanto la conservación y mantenimiento de los yacimientos arqueológicos uno de los objetivos prioritarios en el proyecto, el Consorcio Patrimonio Ibérico de Aragón, ha contado con los servicios del equipo de arqueólogos de Paleoymás para llevar a cabo dichas acciones.
Los trabajos, realizados entre los meses de mayo y diciembre de 2018, han consistido principalmente en la limpieza y desbroce del tapiz vegetal mediante procedimientos manuales o mecánicos (incluyendo tratamiento con herbicidas), llevados a cabo respetando la integridad de las estructuras arqueológicas, y en la retirada de desperdicios, papeles, basuras y todos aquellos residuos ajenos a los yacimientos. De forma adicional se ha realizado revisión del estado de conservación de los propios yacimientos y estructuras arqueológicas así como de los elementos de protección, vallados y señalización en ellos instalados.
[Servicios de conservación y excavación]
