El pasado mes de diciembre se programó una bajada de cota en el embalse de Sabiñánigo (Huesca). El embalse se encuentra en el río Gállego, dentro de la demarcación hidrográfica Ebro, y tiene una superficie total de 27 ha y un volumen total de 2 hm3.
Durante esta bajada de cota existía el riesgo de que algún pez se quedara atrapado sobre el lodo, en las laderas o en alguna balsa aislada, principalmente en la cola del embalse.
El embalse de Sabiñánigo tiene casi 2 km de perímetro y paredes escarpadas; además, una vez que comienza el descenso del nivel de cota la acumulación de lodo impide el acceso desde el exterior y la correcta navegación de las embarcaciones con motor por falta de calado.
Esto provoca que para el rescate de los ejemplares y la toma de muestras de turbidez se elija la embarcación sin motor (piragua). De esta manera Acciona solicitó los servicios de nuestro equipo de medio ambiente.
Técnicos accediendo al embalse
La metodología utilizada es sencilla pero efectiva. Tres técnicos acceden al agua cuando la cota está en su punto máximo, en ese momento hacen un reconocimiento de las márgenes y toman una muestra de agua para medir la turbidez inicial.
De ahí en adelante repiten el proceso dando aproximadamente una vuelta por hora al perímetro, rescatando con redes de mango extensible los peces que hayan podido quedar varados, tras lo cual toman una nueva muestra de agua. Este proceso se repite durante todo el desembalse. En este caso no fue necesario el uso de equipos de pesca eléctrica.
Los peces rescatados pertenecían a las especies Parachondrostoma miegii (madrilla) y Phoxinus phoxinus (piscardo), cuyos ejemplares se recogieron del barro y soltaron en el cauce principal.
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